El jamón ibérico recibe ese nombre porque procede de animales de raza ibérica, pero solo cuando su composición es al menos de un 50% de estos cerdos. La clasificación de los jamones depende tanto de la pureza racial como del tipo de alimentación del animal.
Este alimento, más allá de ser uno de los más cotizados en la gastronomía española, es también un producto altamente nutritivo. Hoy te enseñamos cinco razones saludables para consumir jamón, con beneficios y propiedades muy relevantes.
Alimento rico en grasas saludables
El jamón ibérico contiene gran cantidad de grasas saludables, especialmente ácido oleico, que ayuda a reducir los niveles de colesterol malo (LDL) y aumentar los de colesterol bueno (LDL).
Mantener la línea consumiendo jamón
A diferencia de los que mucha gente cree, el jamón ibérico no engorda. Su aporte calórico es más reducido conforme va ganando en calidad, es decir, cuando el cerdo se alimenta en la dehesa y tiene más pureza racial. El aporte calórico de un jamón ibérico de bellota es tres veces menos que el de un ibérico clásico. Esta es una de esas razones saludables para consumir jamón.
Producto rico en proteínas
El aporte calórico del jamón es superior al de la carne de res, las carnes blancas y los pescados. A su vez, este alimento es muy rico en proteínas de alto valor biológico, por lo que es muy aconsejable en personas que quieran elevar su masa muscular.
Amplia presencia de minerales
Los nutrientes presentes en el jamón son las proteínas, las grasas saludables, y los minerales. El hierro, el magnesio, el selenio, el calcio y el zinc, entre otros, están muy presentes en este alimento.
Alto contenido en vitaminas y aminoácidos
El último motivo inexcusable para consumir jamón ibérico, desde un punto de vista nutricional, es su contenido en aminoácidos esenciales como por ejemplo el triptófano. A esto hay que sumar las vitaminas B, D y E.