El chorizo se define como un embutido de carne picada que se condimenta con vinagre, chile y especias. Pero su modo de elaboración difiere según las regiones del mundo en las que se produce. Hoy os contamos las diferencias entre el chorizo español y el argentino.
Chorizo español, el más tradicional
El clásico chorizo español se prepara con carne magra de cerdo, recortes de espalda y grasa, pimiento negra, orégano, ajo y pimentón. En España hay una extensa variedad de chorizos, peor lo más característico es el uso del pimentón. Existen también los chorizos a partir de ternera y cordero, pero son menos frecuentes.
En el proceso de curación intervienen sales de curado y es especialmente importante la tripa en la que se embute el chorizo. Normalmente la textura es firme, de forma cilíndrica y con aspecto rugoso por fuera. En España hay chorizos frescos y curados.
El chorizo argentino, familiar del chorizo español
Una de las diferencias entre el chorizo español y el argentino es que este último se prepara con más frecuencia con vino tinto. Su carne es húmeda y guarda mucha relación con los que se elaboran en Chile, Uruguay, Bolivia, Perú y Paraguay.
Este embutido es una seña de identidad propia de la gastronomía argentina y da nombre a recetas tan conocidas como el choripán. Mientras que el español se presenta en forma de U, no redondeado pero sí cilíndrico, este se embute en tripas de cerdo con forma de salchichas alargadas.
Por otro lado, otra de las diferencias entre el chorizo español y el argentino es su proceso de maduración. El argentino debe mantenerse refrigerado, para que la carne y las especias vayan macerando. El español, por su parte, requiere un proceso de sacado que es el que le confiere su consistencia tan característica.