El jamón ibérico es un producto que se puede tomar en cualquier época del año. En verano es habitual que acompañe a sopas frías como el salmorejo, pero si vamos a otoño, lo ideal es combinarlo con productos propios de esa época del año, como por ejemplo las castañas y las setas.
Te mostramos dos recetas con jamón ibérico para este otoño que tienen como protagonista precisamente a esos dos productos: las setas y las castañas.
Revuelto de setas con jamón, todo un clásico
Los ingredientes que lleva este revuelto son 300 gramos de setas, tres huevos grandes, tres dientes de ajo, 50 gramos de jamón ibérico, aceite de oliva virgen extra, sal y pimienta, perejil picado, dos cucharadas de nata para cocinar o de leche entera y un poco de vino blanco.
Para preparar la receta se limpian y se cortan las setas en trozos. En una sartén con un poco de aceite de oliva se ponen a sofreír los ajos laminadas y cuando estén dorados se añaden las setas, el perejil y el vino, hasta que el alcohol se evapore.
Los huevos se baten junto a la leche o la nata y se añaden a la sartén, al tiempo que se hace lo propio con el jamón ibérico cortado a tacos. La receta finaliza cuando los huevos se cuajan. No hay que dejar de remover, para que se forme el revuelto. Si se desea, se pueden añadir unas lonchas de jamón al plato antes de servir.
Risotto de jamón y castañas, pero en salsa
Este arroz incluye seis dientes de ajo, aceite de oliva, 300 gramos de puerros, medio kilo de arroz, 300 gramos de jamón ibérico, pimienta y sal, agua o caldo sin sal y queso parmesano rallado. Para la salsa necesitamos unas castañas, cebolla y vino blanco.
Esta es de esas recetas con jamón que sabe totalmente a otoño, por la presencia de castañas. En una sartén se ponen a dorar los ajos y el puerro picado. Cuando ya cojan color se añade el jamón en trocitos. Cuidado con el uso de aceite, pues el jamón ya desprende bastante grasa, así que no es necesaria mucha cantidad. En este momento salpimentamos.
Cuando el jamón ya esté cocinándose, se añade el arroz y se remueve bien para que se sofría un poco. A continuación se añade el caldo poco a poco, tres partes de caldo por una de arroz. Es importante no añadir más caldo hasta que no se haya consumido el restante por completo. Así se obtendrá una textura cremosa.
La salsa se prepara aparte y requiere cocer primero las castañas unos 15 minutos. Después se dejan enfriar, se pelan y se trituran. En una sartén, se sofríen junto con cebolla, vino, pimienta y sal. Cuando el sofrito esté reducido, se pasa pr la trituradora para obtener la textura de salsa.
Finalmente, la salsa se vierte sobre el arroz y se añade un poco de queso parmesano rallado o cualquier otro queso que deseemos, por ejemplo un buen manchego.